Forest Fireflies
Concursos de ideas arquitectónicas
“La muerte es un misterio y el entierro, un secreto.” Stephen King.
Cliente: Cementerio del Bosque de Riga
Superficie: 4500 m2
Estado: Participación
Cronología: 2022
Localización: Riga, Letonia
Tipo de obra: Concurso de ideas
El cuerpo pertenece a la naturaleza, la naturaleza está incrustada en la arquitectura, la arquitectura pertenece a nuestros cuerpos. En línea con estas declaraciones, se encuentra nuestra propuesta para el Columbarium del Cementerio del Bosque de Riga. Se propone como una estancia a cielo abierto en continuidad con el bosque formada por elementos desarrollados en su verticalidad. Los troncos de los árboles se transforman en postes que sujetan y elevan las almas hacia el cielo jugando entre lo pesado y lo ligero. Estos elementos verticales están estructurados en un patrón modular, de esta manera, crecen como árboles en el bosque y están en constante cambio, con diferentes ritmos y soluciones. El resultado es una sala dinámica a cielo abierto siguiendo los pasos de la vida, la muerte, la naturaleza y, principalmente, la idea del tiempo.
El proyecto nace desde un vacío total, un claro en el bosque, buscando la conciencia de un espacio distinto dentro del cementerio forestal. A partir del vacío, el espacio se ordena con una malla regular, un intento de organizar nuestro vacío en el bosque. La memoria del lugar, reflejada en los caminos trazados en el bosque por las huellas de las personas a lo largo del tiempo, los recuperamos para romper la malla y generar la accesibilidad del proyecto. En última estancia, esa recuperación de la memoria del entorno se completa con la degradación de la malla en favor de a creación de unos espacios interiores destinados a lugares de contemplación.
El concepto de la muerte se opone al concepto de la vida. A raíz de la retícula racionalmente organizada, se produce una disolución de la misma que rompe su ortogonalidad generando vacíos en nuestro bosque arquitectónico. Estos espacios interiores se convierten en los recorridos del proyecto y en los espacios de respeto y contemplación de las urnas. Junto al antagonismo de la vida y la muerte, surgen otros temas como el concepto de memoria, del recuerdo de nuestros seres queridos, del tiempo, del lugar.
El proyecto cobra vida después de la puesta del sol, donde las urnas que contienen la muerte, son la luz que guía a los que aún están vivos. El sistema brinda una conexión visual a través de una luz artificial instalada en el reverso de la urna, detrás de un mármol translúcido que de alguna manera genera un vínculo entre el espectador y la persona amada. Una conexión emocionante entre la vida y la muerte que crea una nube de luciérnagas dentro de la oscuridad del bosque.
El módulo básico del columbarium está compuesto por un revestimiento de losa de mármol, una estructura metálica interna y un sistema de enganche de urnas que permite general diferentes conformaciones.
Cuando mencionamos la muerte, no podemos ignorar el fenómeno del tiempo, el CRONOS. Este sistema proporciona continuidad y posible adaptabilidad al espacio, el TOPOS, y al tiempo. El tronco permanece estático, mientras que el cubo, a través de una variedad de ganchos, puede tomar diferentes composiciones siguiendo el ritmo natural del tiempo y aceptando la muerte como una consecuencia natural.
Dibujo realizado por Miguel Barriendos García, Arquitecto Junior de Cronotopos Arquitectura